Revoluciones sobre cuatro ruedas
Los primeros autos japoneses llegaron a los Estados Unidos en 1957 cuando Toyoya Motor Corp. envío dos de sus sedanes Crown a California. Pero pasaría más de una década antes de que los conductores americanos, especialmente los más jóvenes, comenzarán a prestarles atención y comprarlos. Para cuando los Baby Boomers estaban teniendo sus propios bebés en las décadas de los 80s y 90s, la compañías de carros japoneses estaban tomando la delantera con el Big Three de Detroit por el dominio del mercado. Solamente en el 2018, los fabricantes de autos japoneses produjeron 6 de los 10 vehículos mejor vendidos en los EE. UU.